El juzgado número uno de Lo Mercantil ha declarado ‘fortuito’ el procedimiento concursal (antigua suspensión de pagos) de la empresa Talleres Cervantes y absuelve de todos los cargos a los tres imputados, el que fuera administrador único, Antonio García Iñesta y los jefes de Producción y Comercial, Francisco Peydró y Adrián Lillo, respectivamente.

Según la sentencia no existen culpables de la insolvencia de la empresa que provocó su cierre, considerando que se llegó a esa situación de una manera fortuita.

También ha sido absuelta la empresa Cophinus, creada por los dos últimos y que fue imputada por los administradores concursales como cómplice, al considerar el juez que los bienes que está utilizando, como maquinaría y moldes, pertenecen a la propiedad, es decir, a la familia de Carlos Bernabeu. El juez desestima el cargo de alzamiento de bienes al no quedar probado que los bienes sean titularidad de la empresa Talleres Cervantes

En la sentencia, el juez desestima también los cargos de doble contabilidad, incumplimiento del deber de colaboración y la no presentación de cuentas anuales.

Los tres responsables deberán enfrentarse ahora a un nuevo juicio por la gestión de Inyectados Termoplásticos Cervantes, cuya celebración está pendiente de nueva fecha tras ser aplazada por el juzgado número 2 de Lo Mercantil.