El alcalde, José Luis Prats, ha mantenido conversaciones con el jefe de la Policía Local, Francisco Sirvent, encaminadas a mejorar el funcionamiento del cuerpo. Prats explicó a Escaparate que Sirvent es “un grandísimo profesional”, pero se está buscando un “revulsivo” de cara al funcionamiento y organización de la Policía Local, que supondría un “cambio” en la Jefatura, de común acuerdo entre ambas partes.

En cualquier caso, el primer edil negó que el jefe de la Policía vaya a ser “cesado o destituido”, tal como ha publicado algún medio de comunicación, así como que haya sido relevado de algunas de sus funciones desde hace meses.

Prats y Sirvent están estudiando la mejor fórmula posible para introducir este cambio, que pasaría por una permuta o por un cambio de rango del actual jefe policial.

En el caso de una permuta, Sirvent se marcharía a otra localidad, donde ocuparía el mismo cargo que ahora, mientras que su puesto en Castalla lo ocuparía el jefe de Policía de aquella localidad.

Otra de las medidas que se podrían adoptar sería que Sirvent siguiera prestando sus servicios en la Policía Local de Castalla, pero sin ser jefe. Para facilitar esta opción, el Pleno de julio aprobó la amortización de una plaza de Policía y la creación de una de inspector, para la que se abrirá una oposición pública.

El alcalde prevé que la situación esté solucionada en unos tres meses, algo menos en caso de permuta. Por último, Prats desvinculó esta circunstancia del caso del agente que fue detenido por un presunto delito de cohecho.