Por Jose Luis Fernandez Rodrigo

El memorable disco de los maestros Supertramp ha llegado en formato vinilo (yo también tengo esa joya) a las manos de Zapatero, un regalo de los siempre ocurrentes reporteros del Caiga quien Caiga, para que salga por fin de su boca la palabra crisis. Aparte de la gracia, que viene bien como terapia, conviene que nuestro presidente meta en vereda a más de uno para paliar el parón económico, que se nota tanto en comarcas tan dinámicas como la Foia de Castalla.

Lo de los 400 euros del IRPF no pasa de ser un aguinaldo que nos viene bien, pero sin más repercusión. Y animarnos a que consumamos más, el deporte nacional (con permisao del fútbol, claro), tiene poco de socialista.

Intenten ustedes desde el Gobierno propiciar que se forme un tejido industrial moderno, imaginativo y que venda en el exterior. ¿Cómo? Premiando las buenas ideas, para empezar. Todos esos fondos de ayuda al I+D no pueden reducirse a un reparto de dádivas entre empresas grandes que compran máquinas igual de grandes, mientras nuestros jóvenes investigadores siguen con su éxodo a otros países porque aquí se les ignora.

Cuando alguien proponga, por ejemplo, aprovechar la energía solar para autoabastecer hogares, vehículos o empresas, allánenle el camino. Lo siento por las empresas eléctricas, pero nuestro futuro colectivo pasa por quitarse de encima la factura de la luz y del petróleo. Con inventiva y una estrategia de exportación (con el consumo interno no basta, aprovechemos pues la tan idolatrada globalización).

En el caso de nuestra comarca, habrá que ir pensando en idear nuevos materiales, porque el plástico también se deriva del oro negro y cada vez lo vamos a pasar peor con los gobiernos yanquis mangoneando y azuzando a la gentuza en los países que lo tienen. Y, sobre todo, ZP tiene que echar mano del intervencionismo de una vez, hasta donde le dejen, con los servicios públicos y los bienes necesarios para la vida digna de todos (vivienda, agua, energía, sanidad, educación...)

Si la economía familiar no se dilapida en todo eso que nos pertenece por derecho, seguro que consumirá más y nuestro presidente podrá parafrasear a Supertramp: Crisis? What crisis?