La primera parte del encuentro que se disputó el pasado domingo en el Derramador estuvo marcada por el primer gol visitante, que obligó a los ibenses a abrir las líneas para buscar el empate. Sin embargo, los contrincantes aprovecharon esta circunstancia para ampliar la ventaja al contragolpe hasta un 0-3. Los ibenses reaccionaron y los visitantes se encontraron con la expulsión de Lázaro, lo que hizo que se llegara al descanso con la ventaja mínima visitante de 2-3.

En la segunda mitad los locales adelantaron las líneas y dieron la vuelta al marcador con un juego vibrante y nervioso. Los ibenses disfrutaron disfrutaron de las mejores ocasiones de gol, pero faltó acierto en los metros finales para sentenciar el partido. Los últimos tres minutos fueron de máxima intensidad y tensión. El Ibense defendió con uñas y dientes la mínima renta lograda, mientras que los visitantes buscaban el empate a la desesperada, pero El Derramador se convirtió en un bastión.

La próxima jornada los ibenses se desplazarán hasta San Pola para enfrentarse al CD Zapateria FS, un conjunto que ha mostrado peligro en las últimas semanas de liga.