Detenidas doce personas acusadas de los últimos robos a comercios
La Guardia Civil y la Policía Local han detenido a doce personas como presuntos autores de la oleada de robos a comercios que se ha producido en las últimas semanas.
Las detenciones se produjeron el pasado viernes en dos domicilios del barrio de La Dulzura donde se encontraban 30 personas, de edades comprendidas entre los 20 y 30 años y, entre ellas, ocho menores. La operación de ese día se saldó con nueve detenidos y el lunes se procedía a la detención de otras tres personas. En total doce, cinco mujeres y siete hombres, según explicó el mismo lunes en rueda de prensa la Teniente de alcalde del área de Seguridad, Pilar Ortega.
Todos han pasado a disposiciones judicial aunque las mujeres han sido puestas en libertad condicional al tener que cuidar de los menores y los hombres permanecían todavía el lunes en los calabozos municipales.
Más de 200 objetos
Durante los registros a los pisos la Guardia Civil y la Policía se incautaron de más de 200 objetos, entre ellos, relojes, teléfonos móviles, televisores de plasma, gran cantidad de ropa y calzado, joyas y menaje de hogar. Por su parte, los vehículos fueron trasladados por la grúa al depósito municipal.
La operación todavía sigue abierta, según informó Ortega y se mantienen en constante vigilancia las viviendas situadas en las calles Mariana Pineda, Jaime I El Conquistador y Tomás Picó.
La alcaldesa, Mayte Parra, lanzaba un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos al asegurar que “vamos a ser implacables con las personas que vengan a Ibi a delinquir”.
Asimismo pedía a la población “precaución extrema” a la hora de alquilar viviendas y reconocía que esta actuación ha sido posible “gracias a la colaboración ciudadana”.
La operación policial se inició hace veinticinco días cuando comenzaron a llegar al municipio los primeros inmigrantes de esta nacionalidad, ocupando varias viviendas en alquiler en el barrio de La Dulzura, según explicó la responsable de Seguridad, Pilar Ortega. A los pocos días, se desató la alerta entre los vecinos de la zona ya que en los pisos empezaron a concentrarse gran número de personas, hecho que coincidió con el inicio de una serie de robos en comercios y casas de la localidad.
La alcaldesa anunciaba que, una vez finalizada la investigación, las personas que han sufrido robos podrán recuperar los objetos.
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