El joven castallense Evan Luz publica su primera novela épica, 'El Soplo del Dragón'
Escaparate/Castalla. En su carnet de identidad pone José Antonio Rico, pero él ya ha elegido su nombre de guerra: Evan Luz. Así es como quiere que se le conozca cuando le llegue el éxito literario, que espera sin prisa, pero cargado de ilusión y buenas historias y escribiendo cada día y en todo lugar.
De hecho, reconoce que es lo único que le gusta y le ha gustado siempre: “Para mí escribir es un sueño, desde siempre he escrito, no tengo ni el Graduado Escolar porque en el colegio sólo hacía que escribir, fuera en la clase que fuera”. El brillo se sus ojos refuerza la veracidad y humildad de todas sus afirmaciones.
Con 20 años a sus espaldas, un segundo premio en un concurso nacional de literatura y diversos premios de poesía, este alicantino afincado en Castalla se ha atrevido con su primera novela, ‘El Soplo del Dragón’, una historia épica al más puro estilo de las historias de ‘Dragonlance’, ‘Dragones y Mazmorras’ o ‘El Señor de los Anillos’.
Esta excelente muestra de literatura fantástica, plagada de elfos, dragones y criaturas mitológicas, muchas de ellas de invención propia, de momento sólo se puede encontrar en las librerías de Castalla, al precio de 20 euros. La edición de esta novela se la ha pagado el propio Evan Luz, y cada ejemplar le sale por 16 euros, osea que los beneficios, en caso de haberlos, son sólo de cuatro euros por cada libro vendido.
Los 50 ejemplares de la primera edición ya se han agotado, y sus lectores se muestran encantados. Con estas premisas, está claro que el autor no anda buscando el lucro, sino el reconocimiento.
Le ha costado cuatro años escribir ‘El Soplo del Dragón’, y ahora anda inmerso en tres novelas a la vez. Su vida se limita a escribir, ya que no estudia ni trabaja; sólo escribe. Dice que no necesita mucho dinero y que actualmente es feliz, “porque tengo la libertad”.
Sólo espera una oportunidad para que alguna empresa editorial le deje demostrar su talento. “Yo sé que valgo”, afirma.
Y, de nuevo, ese brillo.
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