La historia se ha vuelto a repetir. El Ibi FS cayó el pasado fin de semana ante el Murcia en un partido atípico marcado por el retraso de más de una hora en la comparecencia de los árbitros. Los jugadores ibenses no se concentraban, según Tachinha, a causa de la tardanza arbitral y el escaso tiempo (10 minutos) concedido para calentar. El encuentro empezó “muy mal”, en palabras del técnico, y ya en la primera parte les encajaron hasta tres goles. “Luego empezamos a querer y no poder. Con poca fortuna en la portería”, admitió el entrenador.

En la segunda parte salieron dispuestos a remontar el partido. El Ibi jugó diez minutos espléndidos, pero con tan mala fortuna que se le fueron hasta tres balones a los palos, y un jugador ibense paró un gol de un compañero en la portería enemiga.

La debacle vino cuando en un rechace los murcianos marcaron el 4-1. El equipo se vino abajo tras 14 minutos presionando a un ritmo frenético. Luego vino el quinto, el sexto y hasta el séptimo tanto, que llegó a balón parado.

A pesar de que el técnico se quejó de un arbitraje que calificó como “casero”, y siempre “favorable al Murcia, porque no nos pitaron las faltas que sufrimos”, admitió que “el equipo no jugó bien. Estuvimos muy mal en defensa. No vi al equipo como frente al Talavera”. A este se añade que Flavio se lesionó, por lo que para el próximo encuentro incorporarán a un chaval del filial, Bomba. El entrenador lamentó que no pudieran “dar una alegría” a los más de 100 seguidores de la peña Iberuts que se desplazaron hasta la capital murciana para ver a su equipo.

Es por ello, por lo que el carioca incidió en retomar la dinámico que les hizo vencer frente al Talavera al tiempo que censuraba la actitud de algunos jugares que “se olvidan que juegan en equipo y van en solitario”. En cualquier caso, el entrenador recalcó que “ha sido mucho más mala fortuna que otras cosa”, en alusión a los tres balones que se estrellaron contra los palos. Dados los resultados del conjunto ibense el brasileño vaticinó que los próximos encuentros serán todos ellos complicados No obstante, el entrenador insistirá en sus conceptos de juego basados en someter al contrario a una fuerte “presión” que no le permita jugar, así como “mover” mucho el balón como estrategia para llegar a la portería contraria.