Escaparate/Ibi. El equipo de gobierno ha anunciado que demostrará con informes técnicos y jurídicos, por un lado, la validez del voto del concejal popular Pascual Pérez en el Pleno ordinario del pasado 5 de septiembre en una moción sobre el Alammí y, por otro, “la irregularidad y la inviabilidad legal de la moción que presentó por urgencia el Partido Independiente”.

En el comunicado hecho público, el Grupo Popular no niega que Pascual Pérez se fuera de dos Plenos anteriores (en noviembre y abril) pero “se ausentó de motu propio, de forma voluntaria y porque quiso, no porque tuviera la obligación, tal y como ya indicó en su día el que fuera secretario del Ayuntamiento”.

Ante esta circunstancia, el portavoz popular, Miguel Ángel Agüera, espera que los portavoces de los partidos Socialista e Independiente “tal y como anunciaron acudan a los tribunales”. Y agrega que en el caso de que se demuestre “que el concejal Pascual Pérez no pudiese votar, dimitirá”.

Ante ello, exige que los portavoces de la oposición asuman su responsabilidad política y reconozcan que dimitirán si el voto de Pascual Pérez es legal, “porque ambos han intentado impedir el voto de un concejal elegido democráticamente por la ciudadanía”.

Para Miguel Ángel Agüera, tanto Antonio Martos como Nicolás Martínez “acostumbran a ir en contra de los criterios profesionales, técnicos y jurídicos cada vez que intervienen en los plenos, llevan a cabo ruedas de prensa y redactan comunicados donde ponen en tela de juicio la propia ley y los criterios de los profesionales e incluso secretarios de carrera como en este caso”.