Escaparate/Ibi. A partir de ahora, en el parque Derramador ya no se verán más patos en su estanque. El motivo ha sido una “salvaje gamberrada” que tuvo lugar a finales de julio y que provocó la muerte de estas aves de un modo violento. Sólo dos se salvaron de ser asesinadas y mutiladas con cuchillos.

Desde la Policía Local y la concejalía de Tenencia de Animales se trabaja para encontrar a los responsables de esta acción “y que la ley contra el maltrato animal descargue sobre ellos el mayor de los castigos posibles”, explica la concejal Pilar Ortega. Con este incidente, son cuatro las veces que los patos del parque han aparecido muertos por agresiones violentas. Por esta razón, el Ayuntamiento ha adoptado la decisión de no dejar más aves en el estanque.

Nunca más patos

Desde que existe el parque, han sido los ciudadanos, explica Ortega, quienes han dejado los patos en el parque cuando éstos se han hecho adultos en las casas y durante años han servido de atracción para muchos niños. De hecho, este recinto se conoce popularmente como “el parque de los patos”. La concejalía pide ahora que no se dejen más aves “para evitarles un sufrimiento innecesario” y, en el caso de que aparezca alguno, se trasladarán a otros recintos más seguros.