Las concejalías de Servicios Sociales y Obras Públicas han puesto en marcha un proyecto municipal que irá adaptando paulatinamente las aceras de la localidad para que sean accesibles a personas en sillas de ruedas o con otro tipo de problemas que les impidan caminar con normalidad. La medida facilitará también el tránsito de carritos de bebé y de la compra.

La teniente de alcalde, Sabina Santonja, explicó a Escaparate que se ha comenzado por las calles Cervantes, Travessera de Quatre Camins y adyacentes, donde está prevista la construcción, siguiendo la normativa, de una docena de rampas.

Posteriormente se irá actuando sobre otras calles de la localidad, afirmó Santonja, quien añadió que las zonas de nueva construcción, como La Llauría, ya se hicieron adaptadas para discapacitados, con el objetivo es que Castalla acabe siendo “totalmente accesible”.