La alcaldesa, Mayte Parra, ha presentado un paquete de medidas con las que pretende hacer frente a la crisis económica y “a los desequilibrios en el modelo de financiación local”.

En la moción que se debatirá en el próximo Pleno, la primera edil explica que la caída generalizada de la economía española está teniendo una especial incidencia en las arcas municipales, agravada ésta por los servicios que prestan los ayuntamientos, “sin ser de su competencia, y que hace obligatorio poner en marcha de manera inmediata reformas institucionales y en el ámbito de la financiación que permitan empezar a dar solución al problema”.

Mayte Parra propone la adopción de once medidas que ayudarán, por un lado, a afrontar la difícil situación en la que se pone a las arcas municipales, “dadas las cifras suministradas por el Ministerio de Economía para la participación de los Entes Locales en ingresos del Estado de 2009” y, por otro, para seguir prestando “más y mejores servicios a nuestros ciudadanos sin que les suponga una mayor presión fiscal”.

Congelación de impuestos

El primer punto del paquete de medidas se refiere a la congelación de tasas e impuestos para 2009. Entre ellos, el de vehículos, el de construcciones, instalaciones y obras, el impuesto del valor de los terrenos de naturaleza urbana, la tasa por licencias urbanísticas y la de apertura de establecimientos, la de cementerio, alcantarillado y la de servicios de instalaciones deportivas, hasta un total de diecisiete.

Congelación de sueldos

Las siguientes propuestas se refieren al ámbito de los gastos municipales, comenzando por la congelación de los sueldos de los 21 concejales de la corporación, la supresión de la asignación económica destinada a la Secretaría de grupo que perciben los portavoces o los grupos y la congelación de dietas y asistencias a órganos colegiados y la asignación a los grupos municipales.

Reducción de gastos

Mayte Parra anuncia también reducción de gastos de protocolo y representación, contención de los gastos de publicidad y publicaciones, disminución de un 20% del coste de materiales y suministros, como el de papel, potenciando el uso de internet y correo electrónico, reducción del consumo energético en los edificios públicos, contención del consumo derivado del alumbrado público y la elaboración de un plan de reducción de costes de las empresas públicas municipales.