Juro por Snoopy que esta vez iba a escribir sobre otro tema algo más general que las vicisitudes locales/políticas de mi pueblo pero la actualidad manda y obliga a la reflexión.
Ya conocen los hechos: la gestión del Polideportivo en la época de Ana Sarabia durante la anterior legislatura ha acabado en los tribunales por presunta malversación de fondos públicos; en aquella trama estaban implicados tanto funcionarios públicos como políticos locales.
Hace unos días, el concejal de Hacienda, Miguel Ángel Agüera, denunció una presunta malversación de fondos públicos por parte del gerente del Polideportivo Municipal, Antonio López. Al poco de esta denuncia se filtraron a los medios de comunicación unas conversaciones grabadas que este funcionario tuvo con Miguel Ángel Agüera (por aquella época concejal de Hacienda) y con Pedro García Vargas (entonces y ahora interventor general del Ayuntamiento) en la época en que los juzgados estaban intentando investigar los presuntos hechos de Ana Sarabia. Por todo lo publicado se da a entender que, presuntamente, Agüera y Vargas intentaron convencer a López para que colaborara con ellos para enmascarar el presunto merdé sarabiesco para así engañar a los peritos enviados por el Juzgado para desenmarañar la polimadeja.
Ante estos hechos, el PSOE insta al PP a que elimine a Parra y a Agüera de la gestión municipal por su presunta pasividad/aquiescencia tácita con la antaño concejala pepera Ana Sarabia. Esto es un brindis al sol ya que los políticos se agarran más a un cargo que una vieja a una moto y más en tiempos de crisis con cargos en los que se suelen poner el sueldo ellos mismos.
¿Se irán Parra y Agüera voluntariamente? ¿Se irá Chaves por las tropelías de su hijo o el Rey Juan Carlos por las de su espigado yerno? Lo que tiene que hacer el PSOE es plantear una moción de censura contra la Sra. Parra porque, aunque la pierda, hará que todos los grupos de la oposición se retraten; sobre todo Juan Valls, alias el Vengador Justiciero, que lleva jugando a dos barajas con el PP y contra el PP. Tienen una oportunidad única, gracias a que el pueblo decidió en mayo que no volviera a haber mayorías absolutas, para que el ayuntamiento deje de estar más sucio que el torcamans de Biscoï.
P.D.: el antedicho Vengador Justiciero ha logrado una nueva definición de centro político; es el centro del odio y las risitas irónicas de sus compañeros de consistorio, y lo ha conseguido en un tiempo récord. Una fusión entre precocidad e ignorancia.