El mismo día que el partido popular de Ibi hacía pública su lista electoral para las próximas municipales, publicaban en el diario Escaparate un artículo que firmaba un ente denominado Grupo Popular.
Desconozco si la persona o colectivo que se amparan bajo esa eufemística denominación "grupo popular" es un señor, una señora, un subgrupo dentro del grupo, ya saben: imputados, repudiados, expulsados o cesados. Aunque dentro de su cobarde anonimato se permite valorar la ideología de los demás, concretamente, la mía, y dice que soy de derechas, pero muy, muy de derechas. Ante tan sutil y refinada valoración, amparada sin duda en un conocimiento de mi persona profundo, no dudo que la talla intelectual del anónimo en cuestión debe de estar a la altura de su talla moral, es decir, subterránea. Entre otras cosas porque estaría bien conocer la ideología de quien pretende valorar la mía. Conozco personas de derechas excelentes, solidarias, trabajadoras y responsables. Y lo mismo podría decir de personas de izquierdas. Bien es cierto que cobardes, trincones, ventajistas y corruptos los hay también que se amparan en uno y otro bando y utilizan las siglas de partidos de diferente ámbito ideológico para ponerse las botas. En Ibi tenemos ejemplos de uno y otro signo.
Lo del menage a trois, debe de ser por el trío que el pp sí mantuvo la pasada legislatura con tránsfugas a diestra y a siniestra y con los que tuvo pactos confesables y otros inconfesables para aguantar hasta el final de la legislatura. Esa es la gran pregunta, hagánsela al pp. ¿pactarían ellos a cualquier costa con cualquier partido para mantenerse en el poder? Porque ellos sí lo han hecho en Ibi y en decenas de municipios en la comunidad valenciana, ¿de qué vienen a dar lecciones? Lo que sí tengo claro es que mi ideología es la intentar hacer algo por mejorar la sociedad en que vivo, como hice antes de estar en política y como seguiré después de dejarla: en el voluntariado, en el deporte, en la ayuda a los demás, en la defensa del patrimonio de nuestro pueblo y de nuestro privilegiado entorno y ahí estoy seguro que habrá personas de todas las ideologías, con las que espero seguir encontrándome ahora y en el futuro.
La semana pasada, la decisión mayoritaria de los eurodiputados del parlamento europeo de no renunciar a viajar en primera clase, sonrojó a media Europa. Pero siempre hay atisbos de dignidad en todas partes y 4 diputados españoles, de ideologías completamente opuestas, votaron a favor de cambiar eso: Rosa Estarás (PP), Oriol Junqueras (ERC), Raúl Romeva (ICV) y Ramón Tremosa (CiU). Es decir, desde la derecha conservadora, la derecha nacionalista, hasta la izquierda nacionalista, o la izquierda independentista. La ideología de estas cuatro personas fue la del sentido común y la de la necesidad de tocar de pies en tierra y ponerse en línea con la situación económica trágica de millones de europeos.
Esa es también mi ideología. El iluminado que escribió lo del menage a trois sólo tiene una ideología: la del servilismo, el peloteo al poder, y el vivir a la sombra de la cultura del pelotazo y del trinque. Que el mismo día que el partido gobernante hizo pública su lista, en lugar de explicarnos su proyecto para el pueblo se dedicase a publicar un artículo atacando a la oposición, da una medida de por dónde van los tiros. Pues eso, en ese partido, al menos los del anónimo trío, ya lo tienen claro: no piensan hablarse con nadie.