El equipo de gobierno aprobó el 13 de marzo en un Pleno extraordinario y urgente un decreto para exigir al equipo redactor que conteste las alegaciones y continúe con la tramitación del proyecto de urbanización de Finca Terol.

Sin embargo, un propietario considera que el actual proyecto, debido a las crisis económica, es irreal y plagado de “despropósitos”, puesto que supondrá un desembolso para los vecinos de 350 millones de euros.

A través de un escrito, explica que fue redactado en pleno boom urbanístico y con unos “exagerados sobrecostes” y además se aplicó la LUV de forma arbitraria y expropiando parcelas. Opina que se han ignorado los acuerdos de las asambleas sobre su inviabilidad y considera que en el supuesto de que comenzasen las obras, “se produciría un cúmulo de impagos y desahucios”.

Por ello, indica en el escrito que propondrá en la próxima asamblea de vecinos del 25 de marzo, que se estudie y modifique el proyecto para eliminar todos “los absurdos que conlleva”