Tres vecinos han obtenido la licencia de taxi, otorgada por el Ayuntamiento, poniendo en funcionamieto un servicio que había desaparecido tras la jubilación de los anteriores.
A pesar de ello, los nuevos taxistas denuncian el fraude de un conductor que lleva meses trabajando como transporte público, pero sin licencia. Según explica Jesús Payá, el hecho se ha puesto en conocimiento de la delegación de Transporte en Alicante y en la Agencia Valenciana de Movilidad y la falta grave podría acarrerar al infractor, que conduce un Opel Zafira, una multa de entre 2.000 y 6.000 euros. Payá alerta a los posibles clientes del riesgo que corren “porque, además, no dispone de los seguros necesarios para hacer frente a cualquier incidente”.
La alcaldesa, Mayte Parra, recibía el jueves 21 de julio a los tres taxistas que desde hace unos meses ya tienen la oportunidad de ofrecer, a la localidad y a la comarca, este servicio que sigue teniendo demanda.
La primera edil expresaba su satisfacción por haber podido otorgar estas tres licencias, “ya que ahora la ciudadanía va a poder disponer de un magnífico servicio las 24 horas” y también porque “estas tres personas han encontrado un modo de vida en esta época tan difícil para el empleo y les deseo que les vaya muy bien”.
De las cinco licencias que ofrecía el Ayuntamiento, sólamente estas tres cumplían todos los requisitos solicitados.
Además, uno de los tres vehículos de servicio público está totalmente adaptado. Se trata del taxi de Jesús Payá que cuenta con rampas y anclajes para transportar sillas de ruedas u otras herramientas necesarias para la movilidad de las personas con discapacidad.
Los tres taxistas, Jesús Payá, Francisco José Sánchez y Nacho Herrero, tendrán disponibles sus vehículos en la ya tradicional parada situada en la plaza de la Tartana.