José María Escrigas es licenciado en Derecho y letrado asesor de Sociedades Mercantiles.
Experto en negociación colectiva y planes de redimensionamiento de plantillas y en materia de prevención de riesgos laborales, principalmente en los sectores de transporte, calzado y construcción. Es socio del bufete de abogados Cuatrecasas, Gonçalves Pereira.
Pregunta: ¿Podría explicarnos en qué consiste la reforma laboral aprobada por patronal y sindicatos?
Respuesta: Las ideas clave del II acuerdo para el empleo y la negociación colectiva para los años 2012, 2013 y 2014 firmada por patronal y sindicatos el pasado día 25 de enero son:
1.Que los convenio sectoriales deben propiciar la negociación en la empresa de las materias de jornada, funciones y salarios.
2. Que en el ámbito provincial de negociación se han de abordar y potenciar medidas de flexibilidad interna, debiendo contemplar dos niveles de flexibilidad, ordinaria y extraordinaria.
Ordinaria: En materia de tiempo de trabajo: distribución irregular de un 10% de la jornada anual, con afectación de los horarios diarios. Bolsa de 40 horas al año que puede alterar el calendario anual. Racionalización de horarios.
En materia de movilidad funcional: Fórmulas ágiles de movilidad y polivalencia funcional.
En materia salarial: Acuerdos para modificar la estructura y cuantías salariales, vinculando conceptos retributivos a la productividad y definiendo conceptos variables en función de criterios objetivos ligados a la evolución de la productividad y resultados de la empresa.
Extraordinaria temporal: En materia de tiempo de trabajo: Cuando se necesiten medidas de flexibilidad superiores a los porcentajes y bolsa de horas anteriormente referenciadas.
En materia de movilidad funcional: Realización de funciones distintas a las del grupo profesional si existen razones económicas, técnicas, organizativas o de producción que las justifiquen.
3. Que asimismo la negociación debe abordar medidas de empleo, como el uso adecuado de las modalidades contractuales, la potenciación del contrato a tiempo parcial y medidas de prejubilación ligadas a circunstancias económicas de las empresas.
4. Se han igualmente de prever las situaciones económicas que puedan determinar una inaplicación temporal de condiciones laborales pactadas en los convenios, como el horario y distribución de la jornada, régimen de trabajo a turnos, sistema de remuneración, sistema de trabajo y rendimiento y funciones.
5. Finalmente se adopta una propuesta de acuerdo salarial en los siguientes términos: Los incrementos salariales pactados en 2012 no deberían ser superiores al 0,5% con una cláusula de actualización en función de la variación anual del IPC; en 2013 no deberían exceder del 0,6% con la misma cláusula de actualización y en 2014, y en función del aumento del BIP, el incremento irá desde un 0,6 % a un 1,5%.
P: ¿En qué beneficiará y perjudicará a empresarios y trabajadores?
R: Mas que preguntarnos en que beneficia o perjudica a empresarios y trabajadores dicho acuerdo, lo que debemos analizar y valorar es la respuesta que tal acuerdo ofrece a la actual situación laboral en España, para llegar a la conclusión de que es absolutamente insuficiente, por no decir decepcionante, pues remite a que sea la negociación colectiva la que articule medidas que requieren una implantación inmediata, con el agravante de que la práctica y cultura de nuestra negociación colectiva, excesivamente, rígida e inmovilista, va a hacer muy difícil la negociación de medidas de flexibilidad como las comentadas, de modificaciones de estructura salarial o acuerdos de inaplicación temporal de condiciones de trabajo. Yo lo veo muy difícil, salvo que seamos capaces de cambiar radicalmente de mentalidad y predisposición en la negociación de los Convenios.
P: ¿Qué otras medidas estructurales necesita el mercado laboral español para salir de la crisis?
R: Creo que el mercado laboral español para facilitar la estabilidad y continuidad de las empresas y, por tanto, para poder hacer frente a la crisis, necesita urgentemente que se modifique la rigidez legislativa actual para poder modificar las condiciones de trabajo, para poder aplicar flexibilidad de jornada y horario y para posibilitar formulas contractuales que se adapten a las necesidad y circunstancias de las empresas, esencialmente de las integrantes de la industria manufactureras con una importante incidencia de la mano obra. Finalmente entiendo que a las empresas prestatarias de servicios se les deben facilitar instrumentos más ágiles para poder adaptar las condiciones laborales de sus trabajadores a las exigencias del titular del servicio.
P: ¿Es cierto que España tiene uno de los mercados laborales más rígidos de la Unión Europea?
R: Sí, es cierto, y aunque en la Unión Europea en materia laboral hay un denominador común de legislación tuteladora y proteccionista de las relaciones laborales, en España la legislación laboral es más rígida que la media Europea en todos los aspectos de flexibilidad y movilidad que hemos venido comentando, además de una mayor dificultad para la extinción de las relaciones laborales.
P: ¿Cómo se aumenta la productividad?
R: Desde un punto de vista jurídico-laboral considero que la única fórmula es que la estructura salarial responda cada vez más, no al factor tiempo de trabajo, sino a la cantidad y calidad del mismo, con sistemas retributivos incentivados que motiven al buen trabajo.
P: Según usted ¿se están efectuando las reformas necesarias para crear empleo? ¿qué medidas propondría?
R: Se está avanzando en este sentido, dentro de las dificultades de nuestro sistema de representación económica/social y de relaciones en el ámbito laboral, pero creo sinceramente que falta una voluntad decidida para analizar y abordar las posibilidades y necesidades de empleo por sectores y no como un bloque genérico para todas las actividades empresariales.
P: Opina que el objetivo principal es cumplir el déficit o está en la línea de los que piensan que habría que solicitar un mayor margen de tiempo a Europa para cumplirlo?
R: Creo que es prioritario, necesario y fundamental cumplir con la reducción de déficit prevista, pero creo igualmente que la Unión Europea nos debe conceder un margen imprescindible de tiempo razonable, habida cuenta las peculiaridades de nuestro tejido empresarial y de los sectores empresariales con que contamos para poder afrontar la recuperación económica y del empleo.
P: ¿No es posible efectuar recortes en otras áreas o ámbitos, que no sean la educación y la sanidad, para reducir el déficit?
R: Soy de los que creo sinceramente que una sociedad moderna, justa e igualitaria descansa fundamentalmente en los pilares de la educación y de un sistema sanitario digno y universal, por lo que, menos en estos dos ámbitos, los recortes para poder reducir el déficit pueden afectar a todas las demás áreas de nuestras administraciones estatal, local y autonómica.
P: ¿Es optimista? ¿Cree que España recuperará la senda del crecimiento económico?
R: Necesariamente he de creer en nuestra recuperación, porque los trabajadores y las empresas de nuestro país siempre han sabido responder a las situaciones adversas, y en este caso, a pesar de la gravedad de la adversidad, si a los agentes económicos y sociales se les dota de mecanismos que faciliten la estabilidad de las empresas el futuro deseado se puede lograr en un tiempo razonable. Si ese tiempo se demorase demasiado siempre nos queda el último consuelo de que “no hay mal que cien años dure”.