La alcaldesa se vio obligada a dejar sobre la mesa, en el Pleno del lunes, la propuesta de modificación del PGOU para cambiar la altura de las vallas y la anchura de los caminos en suelo rural al no disponer de la mayoría absoluta necesaria para aprobar la polémica medida. Recordar que con la citada modificación se legalizan las vallas que incumplen la normativa actual, entre ellas, la del chalet de la alcaldesa.
Rafael Pastor (PP) y Felicidad Peñalver (Grupo no Adscrito) mostraron sus cartas al comienzo del Pleno rompiendo ya la disciplina de voto en el primer punto del orden del día, que tuvo que aprobarse con el voto de calidad de la alcaldesa al producirse un empate (diez contra diez) porque, además, en las filas del PP estaba ausente el concejal de Cultura, Antonio Granero.
Sin embargo, este resultado no es válido para una modificación del Plan General de Ordenación Urbana que precisa de mayoría absoluta (la mitad más uno) para salir adelante.
Con el precedente de la votación anterior, la petición de Rafael Pastor de ausentarse en este tema por entender que concurría en causas de abstención bastó para que Mayte Parra dejara el punto sobre la mesa.
Aunque el secretario accidental, Sergio Galiano, descartó cualquier tipo de incompatibilidad relacionada con el PGOU al tratarse de modificaciones de carácter general que afectan a todos los ciudadanos y aunque el edil popular quiso retirar, entonces, su petición, la decisión de la alcaldesa estaba tomada.
Las fuertes discrepancias que mantienen Mayte Parra y Rafael Pastor y que llevaron a la primera edil a retirarle sus competencias en Personal y Policía en mayo de 2010, quedaron en el último Pleno claramente al descubierto, al romper, por primera vez, la disciplina de voto.
También lo hizo Felicidad Peñalver, expulsada del Grupo Popular en febrero de 2009 y ahora en el Grupo no Adscrito, que nunca antes había votado en contra del PP.
Para la alcaldesa, los dos ediles evidencian su objetivo y verifican las grabaciones conocidas hace pocas semanas en las que presuntamente conspiraban contra ella y el PP. "La escenificación de la conspiración fue palpable ayer en el Pleno donde Rafa Pastor no dudó en romper la disciplina de voto para votar en grupo junto a aquellos para los que llevan trabajando él y Peñalver desde hace meses", indica la primera edil.