Pero cuántas vueltas de tuerca nos van a dar los rateros especuladores, esos que están en nómina de lo que pomposamente llaman “los mercados”. Ahora hacemos equilibrios sobre el alambre del temible y trascendental rescate. ¿Por qué? Si hablaran claro de una vez, se destaparía el pastel, esta debacle provocada por ineptos y codiciosos, esas múltiples deudas entre bancos, que ahora quieren que paguemos entre todos.
Nuestro Gobierno debe soportar que esa gentuza apueste contra nuestra deuda pública y hagan subir la prima de riesgo, cuando no somos un país tan moroso ni deficitario como nos quieren hacer creer para castigarnos. Los males que nos abruman tienen una raíz privada, no pública, pero como seguimos arrastrando unos lastres y servidumbres con el poder financiero completamente injustas, así nos va.
¿Bankia está en quiebra? Pues que cierre. Si aplicaran los filtros contables que les han impuesto a ellos y a CAM también al resto de bancos y cajas de ahorro, seguro que en mayor o menor grado, todos están en números rojos o casi, por su bacanal del ladrillo antes de la crisis.
Pero ellos crearon sus reglas del juego. Si antes se forraron a manos llenos con la usura, ahora que den la cara y asuman sus pérdidas.
Por eso, nada de rescates, que en cristiano es una argucia para coger dinero de todos y dárselo a los de siempre.¿De dónde vienen los fondos europeos, sino del IVA y de comprar nosotros coches alemanes, maquinaria, locomotoras del AVE...? Ya está bien de tratarnos como pobretones, tontos útiles. Si Caja Lepe (ya sé que no existe) le debe al Berlin Bank unos dineros que no puede devolver, pues que les desahucien, como hacen a diario sin contemplaciones con familias afectadas por el paro.