El martes 23 de noviembre, Julio Gómez, entrenador de la Unión Deportiva Ibense durante las últimas diez jornadas, presentaba su dimisión irrevocable ante la directiva del club, tras la derrota del equipo en Caravaca.
Según fuentes de la UD Ibense, el equipo estaba dividido entre jugadores y entrenadores y el encuentro frente al conjunto murciano fue el detonante para que saliera a la luz esta situación.
Julio se puso en contacto con el presidente del club para manifestarle sus puntos de vista sobre el tema y le comentó que no seguiría al mando del equipo, ya que le estaba siendo imposible aguantar esta situación.
Por su parte, la directiva de la UD Ibense se está moviendo para buscar a un nuevo técnico que sea capaz de retomar las riendas y poder sacar al equipo de la zona peligrosa hacia su salvación.