El equipo de gobierno, formado por PP y AIDU, aprobó el 30 de mayo el nuevo presupuesto municipal, que desciende en 626.100 euros, lo que supone un 26 por ciento de recorte, pasando de los 2.394.588 euros del pasado año a los 1.768.488 para este 2012.
Todas las partidas presupuestarias disminuyen y algunas incluso se eliminan, como las correspondientes a las plazas de técnico de administración especial (que ocupaba Emilio Jordá) y la de policía local.
Los mayores recortes se han aplicado en fiestas, que se reduce un 34%; en la partida para el mantenimiento de edificios municipales, que se baja un 70%; y en la de actividades deportivos, que disminuye un 80%. También se reducen e incluso desaparecen este año las subvenciones a entidades locales “con el compromiso de que se abonarán las ayudas pendientes de 2010 y 2011”, explica la responsable de Hacienda.
El presupuesto municipal responde a la necesidad de cumplir con el plan de ajuste, al que el Ayuntamiento se ha comprometido tras aprobarle el Gobierno un crédito de casi un millón de euros para hacer frente al pago de facturas pendientes a proveedores.
Sin embargo, para el PSOE, que entiende las medidas de austeridad, es incomprensible cómo se eliminan ayudas a las asociaciones locales y un agente de policía local, lo que provocará la supresión del servicio de vigilancia nocturno, pero “mantienen sus privilegios con un aumento del 19% en sueldos del actual equipo de gobierno”, indica el portavoz socialista, Jesús Ferrara.